Llegaba la noche especial del Lleida Music Festival – la del baile del viernes -, con una banda que teníamos ganas de ver en directo y que asegura la mezcla de hits y bailoteos en el post pandémico escenario temporal.

Sidonie eran los escogidos para traer la dosis de baile que el respetable deseaba – con o sin sillas en la discoteca reconvertida temporalmente a Sala de Directos, Biloba -, y el quinteto estuvo a la altura. Delante tenían un público ávido, que esperaba poder disfrutar del Regreso de Abba, El Incendio y de los temas del quinteto de Barcelona.

Y así fue, tras la espera y con On the Sofa – canción que en anteriores giras no había aparecido en el set list – como iniciático rito musical, empezaron a desgranar la hora y veinte minutos de lo que mejor saben hacer hits. La verdad es que con casi veinticinco años de trayectoria, los casi veinte temas seleccionados, empieza a ser difícil de realizar una selección y que deje satisfecho a los que se inician y a los más veteranos.

La Banda jugó con el público sabiendo que respondía, coreando cada uno de los hits que con una aparente urgencia ejecutaban, Nuestro Baile del Viernes y Fascinado precedidas de Nirvana Internacional y una posterior Me llamo Abba como quinteto inicial un repaso a Shell Kids, Costa Azul y su último trabajo El Regreso de Abba.

Llegó el turno después de Portlligat, Giraluna, Maravilloso (con dedicatoria de amor a Lleida y sus gentes) y No Sé Dibujar un Perro y el Peor Grupo del Mundo. En este punto la banda ejecutó de manera sibilina un Riders on the Storm de los The Doors que sirvió de background para que Marc recitara unos versos y acabara con un All I have to Do Is Dream de los Everly Brothers que ejecutaron acapella los dos hermanos que son Jess y Marc.

La Banda jugaba a cinco bandas cual billar imaginario, y se notaba estaba muy a gusto en el escenario y el público presente necesitaba más hits: el Verano del Amor, Un día de Mierda y Mi Vida Es La Música – momento eclesiástico y escolástico incluido – sirvieron para dar paso a los deseados bises, y allí la banda jugó sus últimas cartas sabiendo que la mano era ganadora, El Incendio, una fantástica Honky Tonk Women – que servia de homenaje a Charlie Watts -, y unas finales Carreteras Infinitas y Estáis Aquí, que pusieron el broche de oro a aquello que esperábamos, Sidonie.

Crónica @ipopfmradio
Fotos @oriolcárceles