Saltar al contenido.

Los Gandules, perversiones con humor

Los Gandules son un grupo de música aragonés, con un repertorio basado en versiones particulares de canciones famosas, a las que añaden letras humorísticas. Compuesto por Dun Gandul y Tobo Gandul, alias en este proyecto cómico-musical de Roberto Montañés y Santiago Díaz.

Con 20 minutos de retraso dio comienzo el espectáculo con su clásica entrada vestidos como sus alter ego, los electrónicos Die Scaphandra, que actúan como teloneros. Durante seis minutos asistimos a una concatenación de sonidos electrónicos de la era 8 bits, acompañados de los primeros chascarrillos de la noche, como, por ejemplo: Pienso luego Egipto.

Porque, aunque realmente al principio de esta entrada hemos hablado de una crónica de un concierto, lo que ofrecen los Gandules, está más cerca de una velada de stand-up comedy que por momentos se acerca al humor absurdo, pero cultureta de Faemino y Cansado y en otros momentos mediante sonidos y poses al gran cómico británico Benny Hill.

A diferencia de en giras anteriores, en vez de un sofá el escenario está copado por dos sillones individuales de estética Chester, cuya única misión es sostener las guitarras de Dun y Tobo.

OLYMPUS DIGITAL CAMERA

El concierto se inicia con uno de sus incontestables Hits: “Equino de mis entretelas” más conocida como Pony y continua con varios temas que versionan Smooth Criminal, Mr Sandman, Locomotion o Go West, entre otros, hasta llegar a otra de sus canciones más reconocibles: Si Gagarin levantara el casco (la Nasa).

Hacia el final del show Los Gandules nos deleitan con una trilogía a Capella, inspirada en la música de los arcades de los 80 como Popcorn, que incluye Ginecólogo Rumano, Pate de pato y La panera y acaba con el momento posiblemente más interesante de la noche: Ladrón de cobre, interpretación libre de Amor de Hombre de Mocedades.
El concierto termina con como ellos mismos denominan: La década apestosa, donde encadenan temas como Follow the leader o Boys de Sabrina.
Finalmente, los bises se componen de tres canciones y finalizan con la canción más coreada por los asistentes: Poliespan.
En resumen 1 hora y 45 minutos de un espectáculo más cercano a la comedia que a la música en directo, que no engaña en lo que ofrece y que a poco que estés predispuesto divierte a cualquier asistente.

crónica by @XaviDoblas
photos by @midamideta

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

IPOP EN MEDIO SOCIALES

A %d blogueros les gusta esto: