Este sábado cinco de marzo tenía lugar un concierto esperadísimo: Fetus, después de dos años de pandemia volvía a Lleida para ofrecernos su música. Con una semana de antelación, más o menos, Ponent Roots, los organizadores, anunciaron, para grata sorpresa de muchos, la programación de este concierto, que tuvo lugar en el Beat de Cappont, un sitio adecuado para tocar en familia: sin escenario, a ras de suelo y con conocidos y amigos alrededor. Teníamos muchas ganas de este concierto, porque sin duda es un gran grupo. Hasta en las pruebas de sonido queríamos ir viendo al grupo de refilón.




Empezaron con el Romanço a Quico Sabaté, un emotivo himno a un héroe antifranquista y anarquista, en el que se explica su última incursión, una canción genial para empezar: al inicio sonando como una canción popular, para acelerar el ritmo después, un preaviso de lo que iba a ser el concierto. Continuaron con otra del nuevo álbum, Sota, Cavall i Rei, formado por el cancionero de Jaume Arnella. Cavallers de la Taula Rodona es otro tema tradicional, de estos que se corean y hacen referencia al mundo de la taberna y el bar, tan propio de Fetus. Después siguió És ara, amics, és ara, uno de los mejores temas del nuevo álbum y que mejor resumen el espíritu del grupo: “com més endavant camines, més s’enxampla l’horitzó, quan entre els homes no hi hagi cap esclau ni cap senyor, jo cantaré cançons de llibertat, jo cantaré cançons pel meu poble”. Siguieron con Felix i les Meravelles y La Timba de les Cartes, en la que suena ese Sota, cavall i rei, que da nombre al álbum.

Poco después sufrieron un percance con el bombo de la batería, que se rompió y tuvieron que cambiarlo. Mientras, Fetus no dejó el espectáculo e hicieron corrandes populars. En una un miembro del público dijo algo así como “Fetus al Beat donen canya i ens caguem en Espanya”. En otra presentaron al grupo, que venía acompañado en esta ocasión por un teclista, Guille Caballero, de Vallcarca. Tras cambiar el bombo, tocaron algunos temas de sus dos primeros álbumes, Epicentre del fangar y Terra Cuita, entre ellos Delícies i Meravelles. Con Querella i Carallot el público se encendió. Uno de los grandes temas de la banda. Tras este volvieron al nuevo álbum, con Dissabte a la nit, una canción de fiesta y celebración, como todo sábado, y Sé que venen pels camins, otro tema de combate y libertad que invita a ser cantado por todo el público.





Tras ello, tocaron Lo comte Arnau y un nuevo tema, que también sonaba a corranda popular, en el que el estribillo sonaba “puta Espanya” i “mori el Borbó”, cantos repetidos a lo largo del concierto. Tras ello fueron con Mite de la Taverna, otro de los temas insignia de la banda, toda una oda a la vida de bar. Continuaron con Àngela Maria, para poco después hacer sonar Somni Barceloní, un tema reivindicativo con el que la sala vibró. Después sonó Senyora Trencadissa, con la que se fueron acercado al final del concierto, pero Fetus tienen un as en la manga y ese fue la versión que se marcaron de Skatalà, el Vell Barrabàs, que hizo que todo el público cantara. Finalmente, tocaron un último tema, que sirvió como cierre del concierto.
A los que no estuvisteis, os perdisteis la fiesta: una local pequeño, con la suficiente gente para que no estuviera vacío, pero no apretados; el grupo tocando a ras de suelo, como en aquellos conciertos en casas okupadas que tanto nos gustaban, y, sobre todo, gente disfrutando, tanto por el público, que cantaba y se movía, como los músicos, a los que se veía en la cara que estaban disfrutando de lo que hacían: ofrecer su música al público y cantar cançons de llibertat i cançons pel nostre poble.
crónica by @acratacappont // @fuegoenlapistadebaile
photos by Oriol Cárceles // @piratallucifer