Desde que vimos en la Trinchera el cartel del Poca Solta Fest, celebrado el cinco y seis de octubre en la Sala Estraperlo de Badalona, supimos que era un evento al que no podíamos fallar. Grupazos locales maravillosos, bandas ya consolidadas y clásicos, todo agitado y bien mezclado para esta potente fiesta. Por desgracia, por diversos motivos personales, solo pudimos asistir el viernes. Aun así, la noche no pintaba nada mal, ya que teníamos por delante a tres grandes bandas.
Ídolos del extrarradio, banda de postpunk de Santander, fueron los encargados de iniciar el Poca Solta. Empezaron con Cosas de críos y No habrá piedad, canción rápida que empezó a agitar al público que iba llegando. Poco después ya sonaba Extrarradio, canción que también pertenece a su álbum La Llamada del Oso, aparecido el año pasado. Los músicos se movían ya con desparpajo por el escenario, dando a la actuación un gran dinamismo. Los sonidos más experimentales se abrieron paso con España. Los últimos temas fueron una locura, uno tras otro: Purga en el parque, rápido; La llamada del oso, más misteriosa y extraña. Cobardes, cobardes, magnífico tema con mucha fuerza ya avanzaba el cierre del concierto, que acabó con Infanticidio. Fue un final que dejaba claro toda la fuerza que iba a pasar por el escenario ese fin de semana en Badalona.
Los siguientes fueron Pennycocks. La genial banda barcelonesa de punkrock se despide de los escenarios. Y este era su ultimo bolo en Cataluña. Así que a cualquier que le guste el sonido cercano a Stiff Little Fingers, The Clash, The Jam y el punk setentero en general no podía faltar, y es que Pennycocks son de las mejores bandas catalanas de los últimos años. El cuarteto ya empezó fuerte: Over Again, dedicado a un exmiembro de la banda, y I need a job, son de los mejores temas de su último LP. Para no dejar a nadie indiferente desde el principio. Con la versión de The Equals, I Get So Excited, el bailoteo estaba asegurado. A continuación, la maravillosa Playing With Fire, toda una muestra de armonía en directo. El concierto iba todo en ascendete, algún pequeño pogo animó la noche, pero la locura se desató cuando llegaron Aquesta és la nostra policía, una breve e irónica canción sobre nuestros “queridos” Mossos, y Suspect Device, de Stiff Little Fingers. Unos alumnos de excelente (o graduados con matrícula de honor) versionando al maestro Burns. Los temas de cierre ya fueron los imprescindibles: Midnight Train, con saltos y emoción asegurados; Burning Down My Youth, adecuadísima para un concierto punk un viernes por la noche, y Down The Underground. Qué bolo tan genial.
Cerraban la noche The Movement, una banda de mod revival danesa. Las dos últimas veces que habían pasado por Cataluña no habíamos podido asistir, así que cuando veíamos unos de los principales reclamos del Poca Solta, no dudamos en ir de cabeza. The Movement lo tienen todo… Canciones melódicas, pero ritmos frenéticos a la vez, elegancia y lucha. Movimiento mod y socialismo, en definitiva. Eso quedó claro cuando el trío liderado por Lukas Sherfey empezó como Karl Marx, How Come? o Fools like you. El ritmo, el tono de las canciones hacía que el concierto fuera un bailoteo continuo, coreando canciones. The Movement es una banda para todo: tanto escuchándola en tu casa, como para acompañarte en noches de fiesta y, como no, para darlo todo en sus conciertos. Canciones más skatalíticas como Control Your Temper fueron una verdadera locura, en contraste con otros como A Little Rain, interpretada a finales del concierto, más calmada, pero no por ello menos maravillosa. Cerraron con Turn Away Your Faces From The Crowd, una energética canción para seguir queriendo más.
Acabar en la pista de baile con soul, tras haber visto tres buenas bandas en directo hace que deseemos volver sin duda. ¡Larga vida al Poca Solta Fest!
Crónica y photos by @EnLaTirnchera