Juntar en un mismo escenario y la misma noche a Jordi Lanuza y Petit de Ca l’Eril, es preludio de una noche de música en mayúsculas y así lo entendió el numeroso público que asistió al Cafè del Teatre de Lleida este Sábado 17 de Marzo.
El concierto empezó con la sobriedad y buen hacer de Jordi Lanuza, quién ha decidido hacer un paréntesis en su trayectoria con Inspira y proponer un disco intimista, directo y lleno de buenas canciones, sin trampa ni cartón. Él y su guitarra acústica interpretando este trabajo ‘Com A Casa‘ y desde el principio del concierto, se respira esa sensación de un trabajo realizado desde la sinceridad y con el que nos abre las puertas de su casa. Una propuesta desnuda de efectos sonoros, simplemente una voz extraordinaria y una guitarra que susurra y completa unos temas que nos llevan al salón de su casa. Creo que lo consigue con esta propuesta. Completó el concierto con una versión de Inspira ‘Plou i No Vol Parar’ y cerró con ‘Gotes d’esperança’ de Com a Casa, un fenomenal final para una propuesta sincera y acogedora.
Después de la propuesta intimista de Jordi Lanuza, llegó el turno de El Petit de Ca l’Eril, que trajo al Cafè del Teatre, su nuevo trabajo, ‘TRIANGLES’. Elegancia elevada al máximo exponente, mezclada con una descarga sonora que hizo vibrar a los asistentes. Una puesta en escena genial, una banda compuesta por dos baterías, bajo, teclados y la voz y guitarra de Joan Pons. La voz de Joan Pons es un susurro frágil, pero contundente, con una propuesta sonora que en directo y con una banda que le acompaña magistralmente, hace que en el directo sea imposible no saltar, gritar, cantar, bailar… Para finalizar la primera parte del concierto, lo hizo con ‘Pedres als Ulls‘, último tema de TRIANGLES y sin bajar del escenario, hicieron un alto en el camino y propusieron hacer unos bises sin tener que hacer ese ridículo de quién sabe que el respetable le va a pedir volver al escenario. El primer tema del bis ‘Partícules de Déu‘, fue coreado, cantado y aplaudido por los presentes de manera entusiasta y ‘Sents com refila l’Òliba‘, una descaga brutal en que la banda hizo lo que una buena banda sabe hacer, acabar con contundencia y maestría. Dos magníficos temas de trabajos anteriores de El Petit de Cal Eril que redondearon un concierto espectacular.
Artículo y fotos by: LO GALL CAR
Agradecimientos a Curtcircuit // ASACC