La Sala Zero de Tarragona se llenó de melómanos y nostálgicos del indie pop el pasado sábado en un concierto que reunió a Cristina Quesada y a The Pains of Being Pure At Heart. La noche prometía emociones y recuerdos imborrables, y no defraudó.




Cristina Quesada. Photos ⓒ by @midamideta
La encargada de abrir la velada fue Cristina Quesada, quien con su dulzura y carisma – acompañada por el guitarrista de Alpaca Sports – logró conquistar a un público que llegó pronto y con ganas. Con su pop luminoso y tintes retro, Quesada interpretó canciones como «Per te e per me» y «You’re my favourite boyfriend», para culminar su actuación con una versión electrizante de «Viaje a los Sueños Polares» de Family, que desató los aplausos del público y preparó el terreno para la esperada actuación principal.
El plato fuerte de la noche llegó con The Pains of Being Pure At Heart, quienes celebraban el décimo quinto aniversario de su icónico y homónimo álbum debut. La banda, liderada por Kip Berman (voz, guitarra y compositor principal), se presentó con Peggy Wang (teclados), Christoph Hochheim (guitarra) y Kurt Feldman (batería). La gran ausencia de la noche fue Alex Naidus, quien no pudo asistir por razones personales, pero su puesto en el bajo fue ocupado con solvencia por Eddy Marshall, miembro de The Natvral, la banda actual de Berman.








The Pains of Being Pure at Heart. Photos ⓒ by @midamideta
El setlist fue un recorrido nostálgico por su primer disco y temas coetáneos, comenzando con «Contender» y «Come Saturday», dos explosiones de guitarras brillantes que transportaron a los asistentes a los mejores tiempos del indie pop de los años 2000. «Young Adult Friction» y «This Love Is Fucking Right!» fueron coreadas con pasión, mientras que «The Tenure Itch» y «Stay Alive» aportaron un momento de introspección entre las melodías ensoñadoras.






The Pains of Being Pure at Heart. Photos ⓒ by @midamideta
El clímax llegó con «Everything With You», «A Teenager in Love» y «Hey Paul», canciones que hicieron vibrar la sala, y el cierre de la parte principal con «Gentle Sons» dejó al público pidiendo más. No tardaron en regresar para los bises, en los que interpretaron «Doing All the Things That Wouldn’t Make Your Parents Proud», «Say No to Love», «Ramona» y «Belong» antes de despedirse con la homónima «The Pains of Being Pure at Heart».
Fue una noche mágica para los fans de la banda y del indie en general, un regreso triunfal a los escenarios que dejó en claro que su música sigue vigente y emocionando como el primer día.
crónica by @ipopfmradio
photos by @midamideta – Carina Santiago