Saltar al contenido.

Música arrolladora desde el País Vasco

Octubre va acabando, tras un mes de grandes conciertos, pero en el último fin de semana aún quedaban fechas más que marcadas en la agenda: el viernes 27, Mayday traían al Cafè del Teatre a Belako, que lleva ocupando las posiciones más destacadas de la escena alternativa desde hace diez años. No es de extrañar, pues, que la sala antes del concierto ya albergara un cuantioso público, mientras Mackaulin pinchaba grandes temas de pop.

No obstante, los vascos no estaban solos: Trunc, grupo relacionado con la escena de queer punk, eran los encargados de abrir la noche. Este trío de jóvenes británicos publicó el año pasado su primer LP, Terra Incognita. Trunc hicieron gala de un sonido pop, aunque sin descartar tampoco momentos más guitarreros o incluso llegando a rapear en algún momento, como hacen en canciones de su álbum: Zombies y, sobre todo, Hey, Idk, que dejó ver el lado más moderno y experimental de la banda.

Sorry supuso un retorno al lado más melódico del trío, que, como anunciaron al público, era la primera vez que tocaban en Catalunya. Por nuestra parte, no conocíamos al grupo, pero esperamos que esta ocasión sea la primera de otras que han de venir. Guitarra y bajista dieron muestras de un gran ímpetu en directo, mientras el público, que ya era numeroso, iba creciendo por momentos. Bored, una canción más agresiva, marcó el final de la actuación de Trunc en el Cafè.

Tras un momento de pausa, en el cual tuvieron que encontrar a su batería, Lander, que había desaparecido, Belako subió al escenario, en una sala que ya estaba hasta la bandera, expectante, ya que el cuarteto vasco levanta pasiones allá donde va. Empezaron con No Tools en acústico, tras la cual tocaron Aquí Sigo Regando, que da nombre a su último trabajo, aparecido este año, Sigo Regando. Durante este tema la cantante, Cris, sufrió un pequeño percance: su micrófono dejó de funcionar en mitad del tema, pero al ser ya una vocalista más que experimentada, pudo solucionarlo a la perfección, usando el micrófono de Lore, la bajista. El grupo empalmó ese tema con Track Sei. Se trató, pues, de un inicio calmado, aunque con ésta última canción ya se notó que iban calentando cada vez más el ambiente con un estribillo potente en el que destaca la voz de la cantante.

En Tie Me Up, el siguiente tema que tocaron, hubo una pequeña confusión, cuando empezaron a tocar dos canciones distintas, pero eso no supuso problema alguno. A pesar de los pequeños fallos técnicos a los que el grupo se enfrentó al principio, dieron un gran concierto en el que repasaron viejos y nuevos temas e hicieron vibrar al público. Siguieron con Sirène, cantada en francés, y Fire Alarm, de su segundo álbum, Hamen, que mostró su lado más siniestro y post-punk. Con Sagurrazen Kanta retornaron a su último trabajo, seguida de Flower Trouble, Orein Orain y Hegodun Baleak III, encadenando nuevos temas uno tras otro, mientras el público, extasiado, oía las tranquilas melodías que nos ofrecía el grupo.

Tras una incursión a uno de sus primeros EPs, Aaa!!!!, con Eat Me y Hong Kon Com, que fueron puro post-punk, una exhibición de su lado más crudo, volvieron a Sigo Regando para tocar Tangerine, muy guitarrera, pero sin perder la melódica voz de la cantante, y Sangre Total, con un carácter mucho más experimental con bases electrónicas, que continuaron en Nice Church. Belako es un grupo que no esconde su compromiso: durante el concierto no faltaron proclamas a favor del feminismo y contra la masacre al pueblo palestino.

White Lies fue la canción que protagonizó, a nuestro gusto, uno de los mejores momentos de la noche. Se trata de una canción emotiva y penetrante que a uno le llega adentro y que en directo sonó mucho más potente que en el álbum. No obstante, el concierto iba llegando a su fin, con grandes temas como Zaldi Baltza, Over The Edge, cuyo tamboreo inicial encendió al público, y The Craft. El público estuvo atento e interesado en todo momento. Por las primeras filas era difícil moverse. No es de extrañar que Belako, con cinco conciertos dados ya en Lleida, haya sabido ganarse al público, y que a la próxima aún haya renovadas ganas. Apostamos cualquier cosa a que la alianza Mayday-Cafè del Teatre seguirá generando bolos que se llenan y despiertan el interés del público.

crónica by @acratacappont – @fuegobaile
photos by Carina Santiago – @midamideta

Deja un comentario

Este sitio utiliza Akismet para reducir el spam. Conoce cómo se procesan los datos de tus comentarios.

IPOP EN MEDIO SOCIALES