El viernes 6 de octubre el Cafè del Teatre se llenó hasta la bandera para ver a unos de los artistas del momento, el dúo ampurdanés de indie Cala Vento, cuya gira de presentación de su último álbum, Casa Linda, aparecido este 2023, les ha traído hasta Lleida, lo que ha generado una gran recepción entre los fans de la banda de la ciudad y sus alrededores. Como se pudo ver ya antes del concierto éstos son muchos y entregados.
Un audio que daba a los asistentes la bienvenida a Casa Linda fue como el silbato de inicio del concierto, mientras Joan y Aleix subían al escenario y se preparaban para empezar una actuación que duró más de una hora y no dejó indiferente a nadie. Los rasgueos de guitarra de Más que satisfechos, tema cargado de energía que abre Casa Linda, fueron un estallido inicial. Siguieron explorando el nuevo álbum con ¿Qué hay del placer?, en la línea de la anterior canción: ritmos animados y vivos, pero con unas letras sentimentales.









Después de ello, hablaron al público, explicando que justo al día siguiente cumplían 9 años en activo… y qué mejor manera de pasar la víspera de un aniversario que rodeado de fans. Tras ello, tocaron La comunidad, uno de los principales temas de Balanceo, su álbum anterior, en el cual se produjeron amagos de pogos entre el público, y Passar pantalla, una canción en catalán de Casa Linda que en su versión de estudio cuenta con la voz de Gorka Urbizu de Berri Txarrak y que es el único en catalán de la discografía del dúo. Hemos de decir que esta canción en concreto nos encantó –entre muchas otras que podrían mencionarse- y demuestran que Cala Vento pueden facturar temas potentes en catalán y con capacidad de emocionar al público.
El repaso a su último trabajo continuó por la senda guitarrera con Tu lugar, uno de aquellos temas que hacen a uno saltar, para bajar luego revoluciones con canciones como Gente como tú, que hizo que el público se emocionara y cantara a coro, Un buen año, ambas de Balanceo, o Antes de él, que acaba con un estallido de sonido, a pesar de su inicio lento, o No hay manera, de Casa Linda, entre otros. La tónica del concierto varió después hacia el formato acústico, generándose otra atmósfera que contrastaba con las de inicio del concierto: Joan dejó las baquetas y las cambió por una guitarra, para tocar unos temas más lentos como La importancia de jugar al baloncesto o Casa Linda, mientras el público miraba a los músicos extasiados.








Con Ferrari Joan volvió a aporrear la batería, algo que se le da genial. No creo que nos equivoquemos si afirmamos que todos los que no habíamos visto nunca Cala Vento salimos asombrados por su habilidad y la fuerza que transmite al tocar. Siguieron con Equilibrio, volviendo a la potencia que había caracterizado el inicio del concierto, para dejar claro que la recta final iba a ser movida. Mientras, la animación y agitación entre el público iba en aumento, con unos primeros pogos incluidos. Desde entonces hasta el final, no paró de cantar y corear todas las canciones, con mucha excitación en las primeras filas, solo interrumpida por algún tema más tranquilo como Fin de ciclo. Teletecho y Conmigo fueron las canciones con las que culminaron un gran concierto: los últimos pogos y los saltos hacia el público de ambos músicos, que al volver al escenario después de surfear entre los asistentes, se despidieron hasta la siguiente ocasión. Dejaban, eso sí, a unos seguidores que no habían parado en todo el concierto, que se sabían todas sus canciones y que con toda la seguridad volverán a Casa Linda cuando sean llamados.
crónica by @acratacappont – @fuegobaile
photos by Carina Santiago – @midamideta