No queríamos comenzar este resumen de lo que pudimos ver y disfrutar en esta segunda jornada de BRUNCH ELECTRONIK FESTIVAL en el Parc del Forum, sin mencionar otro de los aciertos de la organización y es que, al cierre de la primera jornada, el sistema de Buses Lanzadera entre el recinto y la plaza Drassanes funciono a las mil maravillas.

Y es que lamentablemente durante este mes de agosto tanto la línea 4 del metro, como el TRAM están fuera de servicio por obras de mejora, así que llegamos un poco más tarde de lo previsto al recinto y empezamos nuestro periplo en el escenario Groovik con la electrónica elegante de Ida Engberg, cuyo set se extendió 30 minutos más de lo previsto.

Ross From Friends facturó una sesión en su línea, downtempo con una aproximación bastante peculiar al House, envuelta en ritmos jamaicanos, humaradas de dub y beats deconstruidos.

Seguimos nuestro peregrinaje en el escenario Euphorik, con los suecos Little Dragon y su Indie Dance sedoso, altamente influenciado por el nu-jazz y tremendamente marcado por el magnetismo de su vocalista sueco-japonesa Yukimi Nagano.

Volvimos al escenario Groovik para dedicarle unos minutos a Matthias Tanzmann toda una institución como DJ, en activo desde 1996 y uno de los adalides del sonido Deep House ya sea en su propio sello Moon Harbour, como últimamente en comunión con Steve Bug.

Nuestra visita diaria al escenario Harmonik, estuvo dedicada en esta segunda jornada a Innellea, que facturó una sesión mucho más animada y rítmica, tremendamente adictiva y bailable.

Y nuevamente llego la 01:00 de la madrugada y nos volvimos a encontrar en una disyuntiva parecida a la de la jornada anterior.

Personalmente opté por iniciar el ultimo arreón de esta segunda jornada, con una actuación realmente única y especial, y es que en mis 28 años recorriendo festivales y eventos es la primera vez que veo en un cartel a Lil’ Louis (Muchas gracias Organización) y sinceramente yo ya me hubiera quedado aquí y es que ¡Halleluyah Hermanos! House is a feeling!!!!

Pero hay que cumplir con el trabajo y tuvimos tiempo aun de disfrutar con el rey KING CARL COX y su energía ilimitada.

Y claro después del Rey, ya solo pueden jugar los dioses, los creadores del universo y un sinfín de nombres rimbombantes, con los que seguir engrosando estas líneas. Y es que parafraseando a ya nuestro excapitán Gerard Piqué, hay muy pocas bandas (tres quizás) a las que se les pueda aplicar la maravillosa frase de ¡CONTIGO EMPEZO TODO! y por suerte teníamos a una de esas tres para cerrar de la forma más monumental posible esta primera edición de BRUNCH ELECTRONIK FESTIVAL: Nada más y nada menos que Underworld.

En resumen, una magnifica primera edición, con un nivel de organización y logística sin mácula, un público heterodoxo y entregado 100×100 a la causa del baile y unos artistas de primerísima fila que han cubierto a la perfección todo el espectro de la música electrónica de calidad que se hace en nuestros días, sin perder de vista en ningún momento de dónde venimos y el monumental legado que grandes artistas nos han dejado en estos 40 años de música electrónica.

Sin más nos despedimos, con el deseo que las fechas de la edición de 2024 nos vuelvan a ser favorables y podamos contaros nuevamente lo que allí suceda.